4.
Durante
el reinado visigodo en la península, el general Teudiselo fue
designado nuevo rey de los godos en el año 548. Su reinado llegó a
tal nivel el descontento entre los aristócratas godos que se unieron
para conspirar contra Teudiselo y hallaron la ocasión con motivo de
una cena que, por obligación, los reyes daban cada año a sus
nobles.
Discurría
el año 549 cuando en los salones del Alcázar sevillano, a la luz de
las velas, se dispuso una gran mesa para el banquete con abundante
vino y viandas. Teudiselo, como de costumbre, bebió en exceso ya que
era ajeno a la conspiración que se había tramado. En un momento de
la cena y a la señal que habían acordado, los invitados soplaron
sobre las velas que iluminaban la mesa apagando éstas y dejando la
sala a oscuras. Los nobles más cercanos sujetaron al rey y los demás
se fueron levantando, de uno en uno, y pasando frente al monarca
clavaron sus cuchillos en el pecho real. De esta forma vengaron su
afrenta y, al haber sucedido todo en la oscuridad, no había testigos
que pudieran culpar a alguien de haber asesinado al rey y, por tanto,
ningún noble quedaba excluido para ser nombrado nuevo monarca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario